Te dicen un horario de cierre, vas media hora antes por necesidades fisiológicas y ya está cerrado, les pides abrirte los baños y te niegan la entrada, les pides hablar con el encargado y resulta que ya se fué. Pésimo servicio, me cobraron servicios que no me ofrecieron, no regreso.

Pues como voluntario, ha sido una experiencia realmente productiva, aprendo lo que en ocasiones damos por hecho, sin embargo el fabuloso apoyo y paciencia de Elizabeth Vega, quien nos contagia de su energía, entusiasmo y su sabiduría, he aprendido muchísimo. Sin duda un excelente lugar para divertirse y aprender. Gracias a todos en CEA

Me fui al CEA a hacer un voluntariado de monitoreo de tortugas y me pareció una excelente experiencia. La gente del CEA son excelentes personas, muy amables y siempre atentas a que l@s voluntari@s estemos contentos. Tiene una excelente ubicación a pocos pasos del mar y esta cerca de restaurantes deliciosos. Recomiendo ir por algun tiempo a hacer un voluntariado. aprendes muchisismo y pasas un rato genial!!!

Sin duda una experiencia magnífica e inolvidable, uno de los mejores lugares en akumal, lleno de aprendizaje y diversión y personas tan lindas como elizabeth 😃

Me ha gustado ya que es la primera ves en un lugar como este supera mis espectativas, la gente es muy amable y genial

Excelente staff y programas para conservar la vida marina!! Hacen un trabajo muy importante y necesario.

Hermosa playa y se nota el esfuerzo por preservar la naturaleza y garantizar la atención adecuada a los visitantes.

El trabajo que hace el centro es muy importante! Siempre están buscando voluntarios y tienen programas muy padres!

En nuestra experiencia como voluntarios tuvimos problemas para recibir agua. El primer día no tuvimos agua hasta más de 24 h después de nuestra llegada. Hasta la tercera semana siempre se agotaba o directamente no había. Lo hablamos numerosas veces con los responsables y no llegamos a un entendimiento.Por otro lado, una vez aceptamos una cuota (265USD pp en este caso para el voluntariado de tortugas) esperamos una transparencia total. A nuestra llegada, se nos ofreció otro programa como voluntarios (sin costo).El programa en el que se solicitaba ayuda era el de restauración del Coral. Nos pusieron en contacto con la responsable y allí mismo, mientras nos explicaba, se nos informó del precio (36USD por persona y por buceo). Después de esto, tuvimos una conversación con el administrador al día siguiente en la que les hacíamos saber que la forma de proceder no nos parecía correcta y nos incomodaba. Durante esta conversación en ningún momento se nos clarificó absolutamente nada de lo que estaba pasando e incluso se nos enseñó un vídeo de lo increíble y único que era este buceo. Nos dió la sensación de estar en una tienda de buceo y no en un Centro Ecológico sin ánimo de lucro. La transparencia brillaba por su ausencia.A partir de dicha conversación la comunicación fue inexistente. Más tarde nos enteramos, por accidente, del precio que pagaban y el apoyo que recibían de la tienda de buceo y no nos lo podíamos creer.Durante nuestra estancia la comunicación con los organizadores, técnicos y voluntarios era confusa y muchas veces inexistente. Tuvimos la sensación de haber pagado y a partir de ahí tan solo sentimos estar siguiendo la corriente de un programa en el que las tortugas no son la prioridad. La información que se nos proporcionó no pasó de una escueta charla el primer día y a partir de ahí los únicos que nos apoyaron fueron los biólogos. Los técnicos hacían lo mejor posible su trabajo, dentro de las dificultades evidentes del proyecto.Otra situación realmente extraña es el lugar donde se encuentra el CEA, La Plaza. Como voluntarios aceptamos desde el primer momento encargarnos de nuestra manutención. El primer día ya pudimos ver que se estaban tirando kilos y kilos de comida a diario provenientes del hotel. Llegamos a un acuerdo, en el que comíamos las sobras que se estaban tirando. La incomodidad de mirar para el resto del equipo mientras comía era de todo menos inclusiva. No nos sentimos parte del equipo en ningún momento. Otra cosa que nos llamó enormemente la atención es que no se recicla, a pesar de que el CEA tenga un programa para fomentar el reciclaje.Por otro lado, se estaba alimentando a la fauna salvaje (coatíes, pájaros, etc) con tortillas sobrantes en la plaza. Es notable la problemática que hay en las playas con la depredación de nidos por parte de mapaches y zarigüeyas y los reiterativos carteles que prohíben dar de comer a los animales salvajes. Debería ser inaceptable para un Centro ecológico que esto ocurra. La excusa que se nos daba es que La Plaza lo hace todo, no somos nosotros.Por último, nos marchamos con muy mal sabor de boca, por un lado sentimos que las tortugas podrían tener muchos más medios y atención en este lugar, y por otro lado, que nuestra aportación no fue del todo necesaria.Esperamos que con este feedback cualquier voluntario que se plantee ayudar a un animal tan majestuoso y amenazado como la tortuga, se lo piense dos veces antes de hacerlo en este lugar. Nos fuimos con la absoluta certeza de que tan solo es un lavado de imagen para ciertas empresas del lugar y en ningún momento la tortuga es una prioridad.Seguimos esperando respuesta por parte del CEA a un email que enviamos con nuestras sugerencias ya que durante el mes que allí pasamos nadie nos preguntó absolutamente nada y esto dice mucho del interés que tienen por mejorar.

Hermoso!

Espectacular

Desearía menos gente, más tortugas y mejores precios. En general, es una experiencia hermosa.

Pasé 6 meses como voluntario con CEA, ¡y me encantó cada minuto! El personal fue muy amable y cordial. Me ayudaron a encontrar la mejor manera de poner mis talentos a trabajar en apoyo de su misión. El Centro Ecológico Akumal está haciendo un trabajo tan importante para mejorar el medio ambiente, proteger la vida marina y educar a las personas sobre la importancia de ambos.

Intentamos visitarlo ayer pero estaba cerrado por obras. Sería bueno tener un horario de atención correcto o instrucciones en el sitio web o un letrero en la calle. Además, fue muy difícil de encontrar, es el edificio detrás del centro de buceo a la derecha.

Bonito

Amor